No todos los niños tienen a su alcance las comodidades y posibilidades con las que nosotros contamos. En el mundo son muchas las personas que sufren necesidades y pocos los recursos a su alcance para paliarlas. Nosotros, desde nuestra posición de niños, con pequeñas acciones, podemos también ayudar a mejorar la vida de los más necesitados. Aceptar al diferente tal y como es, y compartir lo que tenemos con los demás, con alegría, es una muy buena manera de comenzar.

Lo hemos aprendido con Hermana Patricia, Hermana Amelia y Hermana Visitación de Jesús, procedentes de Argentina, que nos han dado testimonio de sus experiencias vividas en primera persona.

Hoy damos gracias a Dios por esta visita tan especial. #santaangeladelacruz #pastoral

¡ Juntos construimos sueños!